La ambulancia del Servicio de Emergencias de Majadahonda (SERMAJ-Protección Civil) ha atendido un total de 330 avisos en sus primeros tres meses de funcionamiento, desde el 15 de febrero hasta el 15 de mayo, con un tiempo medio de respuesta de tan solo 4 minutos desde la llamada hasta la llegada al lugar de la emergencia.
El mayor volumen de asistencias correspondió a emergencias en vía pública, con 175 casos, seguido de 97 intervenciones a domicilio y 28 por accidentes de tráfico. Además, se registraron dos accidentes laborales, cuatro asistencias en centros de salud, dos en residencias de mayores y una en un centro deportivo.
En cuanto al tipo de emergencias atendidas, predominan los casos de origen traumático (133), seguidos por problemas cardiológicos (44), neurológicos (39), respiratorios (13), psiquiátricos (51) y diversas otras situaciones que incluyen apoyo a otros servicios municipales y asistencia en eventos deportivos y religiosos.
El rango de edad de los pacientes atendidos es muy amplio, con una media de 55 años. El paciente más joven fue un bebé de apenas seis meses, y el de mayor edad, una persona de 98 años.
La alcaldesa de Majadahonda, Lola Moreno, ha valorado positivamente estos primeros meses del servicio:
«En muy poco tiempo, la ambulancia ha superado todas nuestras expectativas. Felicito a los profesionales por su dedicación y rápida respuesta ante cada emergencia y reitero nuestro compromiso para seguir mejorando la atención urgente en el municipio.»
El Ayuntamiento ha invertido cerca de 180.000 euros en este vehículo medicalizado de Soporte Vital Básico (S.V.B.), que está operativo los siete días de la semana y cuenta con un equipo de 13 técnicos y enfermeros especializados. La ambulancia dispone de equipamiento avanzado, incluyendo desfibriladores, monitor con electrocardiograma, aspirador de secreciones, material de inmovilización y kits especializados para atención pediátrica y de partos, garantizando una atención sanitaria inicial eficaz y el traslado seguro de los pacientes a centros hospitalarios.
Este servicio representa un avance significativo en la capacidad de respuesta ante emergencias en Majadahonda, reforzando la seguridad y bienestar de sus habitantes.