Seleccionar los colores ideales es uno de los pasos principales para planificar una decoración. Esta te permitirá ayudarte a tener el control de las relaciones de colores y puede guiarte al momento de elegir las combinaciones de tus muebles, accesorios, pisos y demás elementos en el área que deseas decorar.
Una carta de colores te ofrece una gran variedad de tonalidades, que te mostrarán diferentes opciones para armar la paleta de colores,estos armonizan y/o hacen contraste en un ambiente de forma que lleguen a crear la unidad decorativa.
Al utilizar una paleta de colores que entrelaza el piso, la tapicería, las paredes y los accesorios se produce un balance que le da al lugar la estabilidad estética que necesita.
Lo más importante es que se logre que los tonos de un mismo color familiar junto al resto de la gama y las texturas no consigan el protagonismo entre sí, lo que va a permitir que la mirada pase a todos los elementos sin ser agobio.
Como comenzar a elegir la paleta de color para tu hogar
Para seleccionar los colores adecuados, debes tener en cuenta si el espacio en el que los vas a usar es formal o más social como lo es tu propio hogar. Se debe comenzar por la decoración de las entradas, la sala y el comedor.
El color es muy importante para cualquier tipo de decoración o reforma. Dependiendo de qué combinaciones decidas hacer, puedes conseguir estilos totalmente diferentes.
Lo que importa en esta ocasión es que ellos reflejen tu personalidad y la de tu familia, por ello es importante elegir la paleta adecuada, para saber qué colores combinan mejor, que mezclas realizar y combinar los muebles u otros objetos, una excelente opción para las paredes es el esmalte al agua.
Toma en cuenta tus emociones para combinar tonos
Lo primero que debes tener en consideración son las sensaciones que te gustaría transmitir a tu hogar o la habitación que deseas remodelar.
Si se trata de una oficina, los colores neutros funcionarán mucho mejor que los brillantes, para un dormitorio, los tonos más suaves y claros van a ayudarte a obtener un buen descanso, mientras que en la sala de juegos puedes optar por colores más jugados y vibrantes.
Cómo empezar
Para hacer de esta una tarea mucho más simple, te recomendamos mirar una rueda de color la cual podrá serte de gran ayuda para que logres comprender cómo se encuentran organizados, cuáles son los colores complementarios (opuestos en la paleta) y cuales son análogos (cercanos en la paleta). De esta manera vas a poder formar una mayor claridad al momento de elegir.
Puedes también optar por las combinaciones monocromáticas, es decir, varios tonos de un mismo color, elegir el negro y blanco como protagonista, o también jugar con los colores primarios.
Por último, debes considerar que los colores se dividen en cálidos y fríos. Los amarillos, rojos y naranjas entran en la primera categoría, y por lo general logran transmitir intimidad, energía, cercanía y calidez.
Mientras que los azules, violetas y verdes son considerados fríos, estos suelen dar la sensación de calma, serenidad, tranquilidad y elegancia.
¿Qué colores elegirías?
Como ya lo mencionamos al principio, los colores van a depender de tu estilo y de las sensaciones que desees transmitir. Una vez que tengas esto claro, es momento de que elijas los tonos de tu paleta.
Lo recomendable es que sean de 3 a 4, y que uno de ellos sea neutro para que logre dar un descanso visual y ceda un respiro al momento de combinar. Para que elijas, puedes partir por lo siguiente:
- Colores análogos: elige colores que se encuentren ubicados cerca de la rosa cromática, como rojos y naranjos.
- Colores complementarios: elige tonos ubicados en puntos opuestos de la rosa cromática, como lo son el amarillo y azul.
- Toma en cuenta los colores monocromáticos: elige variaciones de intensidades y tonos de un mismo color.
Busca inspiración
Para finalizar, lo más recomendable es que busques inspiración, en Pinterest vas a encontrar un sinfín de paletas de colores ya armadas. Puedes darle un vistazo y ver si esta se adapta a tus espacios o si necesitas darle alguna variación para adaptarla a tu gusto.