La temporada del fútbol europeo, en la que los clubes son los auténticos protagonistas, ha tenido su fin con la victoria de la Champions League por parte del Real Madrid el pasado 26 de mayo en Kiev. El triunfo del equipo blanco contra el Liverpool en la gran final ha sido la certificación del poder de los madrileños en Europa, donde llevan a lo más alto en los últimos tres años. Se trata, entonces, de una revalidación del poder del club presidido por Florentino Pérez, que aunque arrastre cierta falta de continuidad en los partidos de Liga, competición en la que fue prácticamente excluida desde octubre, en Europa siempre encuentra la manera de imponerse sobre sus rivales, como bien reflejan los partidos ganados a pulso contra la Juventus y el Bayern Munich antes de llegar al acto final contra el Liverpool.
Pero este año no ha sido solo el Real el que ha puesto Madrid al centro del mapa del fútbol europeo. La victoria del Atlético de Madrid en la final de la Europa League contra el Olympique Marsella había precedido el triunfo de los blancos. De hecho, hacía más de veinte años que la misma ciudad, Milán, no se salía campeona en las dos principales competiciones europeas. Ahora, ambos equipos se citarán en la final de la Supercopa de Europa, que se disputará en la capital estonia, Tallin, el 15 de agosto.
La solvencia y el cinismo tanto del Atleti como del Madrid en los dos últimos actos de los torneos europeos que han jugado han representado sin duda el valor añadido que servía para ganar. Aunque iban de favoritos, los dos conjuntos madrileños han estado sufriendo antes de encontrar el primer gol que abriera la lata. En ambos casos han sido dos franceses los que han dado el primer paso al frente para romper el hielo y empezar con una lenta pero constante destrucción del rival. En el caso de los colchoneros ha sido Antoine Griezmann el autor del primer gol, mientras que para los blancos el tanto del 1 a 0 ha venido desde las botas de Karim Benzema. Si bien los dos no se encontrarán en la selección francesa que irá al mundial por la ausencia de este último, ambos han sido fundamentales para dar el título a sus equipos.
Con la selección española rumbo al mundial de Rusia, que acaparará las miradas y las expectativas de todo el mundo, como una de las grandes favoritas para esta competición, está claro que el papel de los dos equipos de Madrid ha sido clave también en la formación de la ‘Roja’. Si bien haya muchos extranjeros en ambos equipos, hombres como Saúl, Koke, Isco, Ramos y Carvajal son seguramente figuras importantes en la selección entrenada por Julen Lopetegui. Madrid se confirma entonces una fuerza polarizadora del fútbol europeo, y con ella toda la Liga, el torneo que más emociones despierta en los aficionados del fútbol mundial.