Huelga
Foto: El Iceberg

Madrid, sin prensa

Los repartidores de prensa autónomos, hartos de las condiciones que les propone la empresa, hoy no distribuyen prensa.

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Foto: El Iceberg

El viernes 20 de julio, los trabajadores encargados de la distribución de prensa por la Comunidad de Madrid han dejado de hacer sus funciones ante la negativa de la empresa distribuidora, Boyacá, de negociar unas condiciones con los trabajadores.

Los repartidores han descargado todos los productos informativos en la misma sede de reparto debido a que, según los trabajadores, la empresa podría denunciarles si mantuvieran los periódicos en el vehículo.

“Más de 150 familias dependen de esta empresa”, manifiestan los trabajadores.

“Las intenciones de Boyacá son las de reducir  el número de trabajadores, establecer un sueldo mísero y contratar a personas que acepten estas condiciones”, afirman trabajadores anónimos.

La Policía ya ha procedido a apuntar las matrículas de las furgonetas que se encuentran paradas en la sede y que seguirán allí “si no se les echa”.

Se estima que se han dejado de repartir 90.000 ejemplares por Madrid. Esta huelga podría llegar a suponer hasta 700.000 euros de pérdidas cada día.

“Más de 150 familias dependen de esta empresa”, manifiestan los trabajadores.

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Foto: El Iceberg

Los repartidores han afirmado que en el caso de que no puedan seguir protestando en la sede por una negociación de condiciones laborales digna, continuarán la protesta en el exterior.

Fuentes de la empresa distribuidora aseguran que están intentando cubrir todas las necesidades del reparto lo más rápido posible hasta que se encuentre una solución.