Valdemorillo Patrimonio

Luz verde para documentar el patrimonio de Valdemorillo

Anunciada ya en su día como una acción decisiva a favor del turismo local, la presencia de Valdemorillo dentro del Plan de Fortificaciones de la Guerra Civil que elabora la Comunidad de Madrid, en el que precisamente cobra relieve por la importancia que tuvo este lugar dentro del denominado Frente Oeste, la idea avanza de la teoría a la práctica. De hecho, la Dirección General de Patrimonio Cultural ya ha dado su autorización para los trabajos de documentación que son el primer paso importante y, mejor aún, sobre el terreno, que ya se da para hacer efectivo dicho proyecto. Una realidad que entra así en el desarrollo de su primera fase, la de prospección arqueológica, encaminada a analizar esos vestigios que se localizan en este término municipal, donde es conocida la existencia de un “valioso” patrimonio que forman los restos de fortines, trincheras y demás elementos de los que se tiene constancia. Unas estructuras que, puestas aún más en valor gracias al citado Plan, son la base para una nueva fuente de dinamización turística.

“Sabemos que estos restos son parte de la historia local, por lo que resulta especialmente interesante el velar por su protección y conservación, y a ello va a contribuir de modo decisivo esta propuesta de la Administración regional que, desde el principio, ha sido consciente de la necesidad de implicar también a los ayuntamientos que, como el nuestro, consideramos que estos bienes de doble interés, cultural e histórico, constituyen otro motivo más para acercarse a conocer el municipio, a disfrutar de sus caminos, de sus gentes y, en definitiva, de todo lo que puede llegar a ofrecer al visitante”. De este modo, destaca la regidora la importancia de entrar en esta fase de prospección, donde el trabajo de los arqueólogos venga a confirmar la relevancia de las construcciones existentes en el perímetro de esta localidad, que fue en su día línea de defensa, siendo utilizadas por artillería y sodados. En concreto, son numerosos los fortines y restos de las trincheras que se localizan en buen estado, y que aún podrán ser mejor conocidos por todos los vecinos “y ese turismo que viene registrándose específicamente a la hora de efectuar rutas que llevan a encontrarse con este tipo de estructuras que, gracias al citado Plan de Fortificaciones, se hacen más visibles con el trabajo de campo que ahora se inicia”.